Oswaldo Reynoso

El tema de la juventud o adolescencia en la literatura peruana ha sido una constante que permite a los lectores adentrase en la configuración de un sujeto que se encuentra en su etapa de formación. Y, en este sentido, la obra de Oswaldo Reynoso (1931-2016) ha sido una de las más prolíficas, puesto que aborda constantemente el paso de la adolescencia a la vida adulta desde la perspectiva de la conformación del deseo y la masculinidad. Sin duda, su libro más conocido es el volumen de cuentos Los inocentes (1961), en el cual el autor se adentra en las vicisitudes de los jóvenes de las barriadas limeñas, especialmente en el ámbito de sus inquietudes sexuales y los diversos retos que una masculinidad hegemónica les impone.

Antonio Roig Roselló

Si bien Todos los parques no son un paraíso, la novela autobiográfica de Antonio Roig (1939-), obtuvo un éxito sin paliativos en el momento de su publicación, el libro ha caído, en los últimos años, en un olvido considerable. Subtitulada, para alejar cualquier tipo de dudas, Memorias de un sacerdote, fue finalista del Premio Planeta en 1977 y su contenido generó un escándalo monumental, que culminó con la expulsión de Roig de la orden de los Carmelitas Descalzos. Esta novela forma parte de una trilogía de alto contenido autobiográfico que Roig completó en los años subsiguientes con Variaciones sobre un tema de Orestes (1978) y Vidente en rebeldía: un proceso en la Iglesia (1979). Sin embargo, es en Todos los parques no son un paraíso donde Roig consigue alcanzar un mayor grado de notoriedad: se trata, a fin de cuentas, de un texto pionero que nos da acceso, con una audacia inusual para la época, a una panorámica compleja de las subjetividades subalternas.

Juan José Sebreli

Notable figura del ámbito intelectual argentino desde la década de 1950, Juan José Sebreli (1931-) ha escrito importantes ensayos en el campo de la sociología, la filosofía y la crítica literaria, entre los cuales pueden mencionarse Buenos Aires, vida cotidiana y alienación (1964), Los deseos imaginarios del peronismo (1983) y Escritos sobre escritos, ciudades bajo ciudades (1997). Este último incluye su influyente “Historia secreta de los homosexuales en Buenos Aires”, una aproximación pionera a la historia de la homosexualidad en Argentina. Entre 1949 y 1951, Sebreli, junto con otros jóvenes universitarios, editó la revista Existencia, en la cual dio a conocer el artículo “El sentido del ser a través de Oscar Wilde” (1950), una defensa audaz de la homosexualidad como “elección”, en la estela del existencialismo. Fue colaborador de las revistas Sur y Contorno. En 1971, se contó entre los fundadores del Frente de Liberación Homosexual, del que se desvinculó muy pronto, debido a su aversión por las políticas identitarias.

Vanessa Show

Vanessa Show (1953-2023) nació en el seno de una familia de muy buena posición económica de la provincia de Santiago del Estero, perteneciente a una región —Norte Grande Argentino— marcada por altos índices de pobreza, y de donde procederán numerosas travestis y trans de generaciones posteriores. La tensa relación con su padre —al que describe como “golpeador” y “misógino” (Show, 2012: 9)— propició un temprano alejamiento de la casa familiar: a los 15 años, Show se trasladó a Buenos Aires, donde desempeñó diversos oficios hasta que inició su carrera como bailarín en espectáculos revisteriles de importantes teatros porteños, como el Maipo o El Nacional.

Camila Sosa Villada

Camila Sosa Villada (La Falda, Córdoba, Argentina, 1982) pasó su infancia y adolescencia en pequeños pueblos de la serranía cordobesa. Su devenir travesti durante la adolescencia la enfrentó al rechazo familiar y a la transfobia de ese entorno rural. A los 18 años llegó a Córdoba para estudiar Periodismo y, luego, Teatro en la Universidad de esa ciudad. Por entonces, su vida se repartió entre la diurna rutina universitaria y su trabajo nocturno como prostituta, lo que le permitió sobrevivir y donde conoció a muchas de las chicas que serían su familia adoptiva y retrataría en su novela Las malas (2019). En casi todas sus obras, incluida la dramaturgia, Sosa Villada ha elaborado lo que podríamos denominar, siguiendo a Leonor Arfuch (2007), una “narrativa vivencial”: allí aparecen sus recuerdos más antiguos, su infancia, su devenir travesti, y lo que he llamado su “llegada a la trans-escritura” (Maristany, 2022).

Luis Troitiño

En 1967 Luis Troitiño (Tucuman, 1932) fue cofundador de “Nuestro Mundo”, primer grupo político homosexual de la geografía hispana. En una extensa entrevista, publicada en el blog de memorias y archivos Moléculas Malucas, Luis repasó los derroteros de la vida marica en la Argentina de mediados de siglo pasado y describía el proceso de politización de los primeros homosexuales porteños. En 2020, año en que se realizó la entrevista, Luis vivia en un barrio de clase trabajadora en los suburbios del Gran Buenos Aires. Con 87 años, era el encargado de un pequeño comercio de golosinas en cuyo entrepiso dormia entre sus libros y algunos enseres.

David Vilaseca

En uno de los episodios más conocidos del Quijote, Ginés de Pasamonte, un malhechor condenado a galeras, comenta a Alonso Quijano que está escribiendo su autobiografía. Don Quijote le pregunta si ha finalizado el texto y Ginés de Pasamonte le responde: “¿Cómo puede estar acabado […] si aún no está acabada mi vida?”. Este episodio recuerda una de las entradas de Els homes i els dies (2017), los diarios de David Vilaseca (1964-2010), en la que el escritor y académico, sintiéndose atrapado en una tortuosa madeja autobiográfica, afirma: “Vull explorar la veu d’algú altre i no en sé: l’únic que em surt és això, aquest discurs obsessiu sobre mi mateix, aquest projecte d’autobiografia penosa i fragmentada que no acabaré d’escriure mai” (Vilaseca, 2017: 508).

Xavier Villaurrutia

El mexicano Xavier Villaurrutia (1903-1950) fue un poeta excepcional, de los primeros en incluir con discreción y cierto secretismo el tema homoerótico en la poesía mexicana de principios del siglo XX. Fue también dramaturgo y escribió críticas de literatura y artes, sobre todo de pintura. Perteneció a un grupo de jóvenes amigos en quienes destaca su búsqueda de universalidad poética; además, los miembros del ahora conocido como Grupo de Contemporáneos estaban unidos por su libertad artística y su exploración de la entonces sexualidad heterodoxa. Diríamos ahora que Salvador Novo, Villaurrutia o Carlos Pellicer —entre otros— fueron pioneros en los caminos de la homosexualidad y el homoerotismo, y que dichas prácticas fueron llevadas a sus versos. Los Contemporáneos ganaban su propio dinero y tenían sus propios espacios, circunstancia que favoreció el ejercicio de su heterodoxia. El poemario capital de Villaurrutia es Nostalgia de la muerte, cuya primera edición data de 1938 bajo el sello de la editorial Sur de Buenos Aires. La segunda edición, corregida y aumentada por el autor, y considerada definitiva, fue publicada en México por la editorial Mictlán en 1946.

Luis Antonio de Villena

Poeta, novelista, ensayista y crítico, Luis Antonio de Villena (1951-) es uno de los escritores gais de la primera hora del posfranquismo y uno de los más influyentes de España. Su lírica, erudita y repleta de referencias culturales, se inscribe dentro de la tradición del homoerotismo maldito y decadentista. En la poesía villeniana, el elogio de la belleza del efebo viene acompañado por recurrentes reflexiones de índole existencialista y una melancolía propia de la literatura finisecular. En sus más de noventa libros esboza muy hábilmente un canon de la literatura gay al tiempo que canoniza su propia vida y obra. En sus ensayos y relatos predomina la temática (auto-)biográfica. Gran parte de su creación literaria se centra en su propio personaje, lo que permite al autor presentarse como miembro de una élite gay sofisticada y aristocrática. Ejemplo claro de esta autofiguración levemente camuflada sería la voz narrativa de su novela Malditos (2010).

Luis Zapata

La obra de Luis Zapata (1951-2020) ha sido, sin duda, la más estudiada por la crítica en cuanto a cuestiones de literatura mexicana de contenido homoerótico se refiere. A su vez, sus textos han gozado de numerosas reimpresiones que le han valido una amplia popularidad dentro de la comunidad LGBTIQ+ hispanoamericana. En consecuencia, es normal que cuando se habla de literatura gay en México el primer autor que se menciona sea Zapata: esta circunstancia se debe a la publicación de su emblemática y conocida novela El vampiro de la colonia Roma (1979). Dicho texto causó un gran fervor entre el público por dos motivos: el primero —y más atrayente— fue el hecho de poner sobre la mesa la vida de un prostituto homosexual que recorría apasionadamente la Ciudad de México en busca de clientela; el segundo se debía a la ausencia de signos de puntuación en dicha novela, lo que generaba una doble transgresión al proponer la oralidad como punto de partida para el desbordado discurso del narrador.